El estofado de pollo andaluz o estofado a la andaluza es una receta muy fácil de preparar y además está deliciosa. Hay muchas versiones de este estofado andalusí, y la que hoy os traemos resulta irresistible. Ahora que se aproxima es frío, es un plato agradecido y muy reconfortante.
Si queréis adaptar la receta para bebés, podéis suprimir la sal e incluso el pimentón.
¡Vamos con este guiso de pollo andaluz!
Ingredientes para hacer estofado de pollo andaluz
- 1 kg de pollo troceado (podéis elegir la parte que más os guste)
- 3 dientes de ajos
- 1 cebolla
- 1 cucharada de almendras
- 1 cucharadita de Pimentón
- Comino en grano
- 1 cucharada de perejil fresco
- 1 huevo
- 1 copa de vino blanco
- 500 ml de caldo de pollo o agua
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Elaboración de este guiso de pollo andaluz
Lo primero que haremos será lavar el pollo y salpimentarlo al gusto.
Pelamos y lavamos los ajos, y los cortamos en juliana.
En un cazo con un poco de agua, ponemos el huevo a cocer durante 8-10 minutos. Retiramos del fuego una vez esté cocido el huevo y lo dejamos enfriar.
Añadimos un chorrito de aceite a una sartén, y freímos los ajos a fuego medio. Cuando hayan cogido un ligero color dorado (con cuidado de que no se queme), apartamos del fuego y añadimos los ajos a un mortero.
En la misma sartén donde hemos frito los ajos, añadimos el pollo troceado, cocinando por todos los lados a fuego medio – alto durante unos minutos. Una vez se torne color dorado, sacamos del fuego y reservamos.
En una cazuela añadimos un poco de aceite y rehogamos durante unos minutos la cebolla finamente picada. Cuando la cebolla esté ligeramente dorada, añadimos el pimentón, removemos unos segundos y añadimos el pollo que teníamos reservado, junto con el vino blanco y el caldo de pollo. Mezclamos y dejamos cocinando a fuego medio – alto.
A continuación añadimos al mortero donde están los ajos, una cucharada de almendras, unos granos de comino y lo majamos todo muy bien hasta que formemos una masa espesa. Añadimos a la cazuela donde está la carne, removemos y tapamos la cazuela. Dejamos cocinar por unos 30 – 35 minutos, removiendo de vez en cuando para evitar que se pegue.
Por último añadimos la yema del huevo desmenuzada y el perejil fresco a la cazuela y seguimos cocinando sin tapadera hasta que el caldo haya reducido y quede con textura espesa o al gusto. Rectificamos de sal si es necesario.
Servimos, y para aprovechar la clara del huevo cocido, podemos presentar el estofado emplatado con la clara desmenuzada por encima…, ¡riquísimo!