El guisante ocupa un lugar destacado en la dieta infantil debido a sus importantes cualidades nutricionales. Este posee un contenido interesante en proteínas vegetales que difiere dependiendo de si está fresco o seco, y se diferencia de otras legumbres en que posee un mayor contenido en azúcares, de ahí su ligero sabor dulce, que se hace más evidente cuando se consume fresco.
¿Qué aportan los guisantes?
Se encuentran en el mercado durante todo el año, pero es en la primavera cuando los puedes encontrar frescos.
Hay que tener en cuenta que, al secarse, sus azúcares se transforman en almidón. Por ello cuanto más dulces, más frescos son. Es entonces cuando más cantidad de vitamina C poseen; sin embargo los guisantes de lata a veces pueden perder parte de esta vitamina, aunque conservan las proteínas y los minerales. Es por ello que para hacer este puré de guisantes para bebés te recomiendo que uses guisantes frescos o congelados.
Otras de sus características que lo convierten en un alimento ideal para bebés y niños de todas las edades es que combina a la perfección con otras verduras o cereales, por lo que fácilmente puedes obtener un plato único completo y muy equilibrado.
Por otro lado, los guisantes aportan bastante fibra y más vitaminas que otras legumbres, especialmente la B1. Ver más alimentos con fibra.
¿Cómo ofrecer guisantes al bebé?
Los bebés pueden comenzar a comer guisantes desde tan pronto como se inicien en la alimentación complementaria, entorno a los 6 meses de edad.
Al contrario de lo que sucede con otras legumbres, el guisante es muy fácil de digerir, por lo que no es necesario emplear el pasapurés en su elaboración.
Puedes ofrecérselos (siempre cocidos) a tu bebé en purés, sopas, elaboraciones sólidas de tipo BLW (baby led weaning) o simplemente machacados con la ayuda de un tenedor. También puedes agregar a cualquier otro plato un poco de harina de guisantes. No conviene ofrecer guisantes enteros a bebés pequeños, por ser un alimento redondo y resbaladizo. Saber más sobre alimentos prohibidos en bebés.
Receta de puré de guisantes para bebés
Ya hemos visto que el guisante contiene valiosas proteínas vegetales, por lo que este puré de guisantes para bebés es especialmente proteico.
Los guisantes tienen un sabor naturalmente dulce que atrae a bebés y niños pequeños. Se pueden combinar con una gran variedad de alimentos para hacer deliciosos purés, por lo que puedes versionar al gusto la receta propuesta. Por ejemplo, obtendrás un plato delicioso y especialmente rico en fibra y minerales si combinas el puré con verduras y hortalizas de temporada. ¿Por qué no probar a combinar con…?
- Verduras: Zanahorias, coliflor, patata, batata o boniato, calabaza…
- Fruta: manzana, albaricoque, plátano…
- Otros: pollo, pescado, lentejas
Si además lo combinas con arroz o pasta, puedes aumentar el valor biológico de estas proteínas y obtener un plato con una calidad de proteína similar a la carne, aunque sin las desventajas de esta: es decir sin exceso de grasa saturada ni de colesterol.
Puedes versionar al gusto la receta propuesta. Por ejemplo, obtendrás un plato delicioso y especialmente rico en fibra y minerales si combinas el puré con verduras y hortalizas de temporada.
Ingredientes:
- 250 g de guisantes.
- 1 calabacín pequeño.
- 4-5 hojas de menta fresca.
- Una pizca de sal marina sin refinar (opcional para bebés mayores de 12 meses)
- Un hilito de aceite de oliva virgen extra para servir (opcional)
Elaboración:
- Cuece los guisantes y el calabacín en agua hirviendo o al vapor hasta que queden tiernos. Reserva el agua de la cocción. Asegúrate de no dejar los guisantes mucho tiempo en el fuego después de cocidos para que no pierdan nutrientes; además, soltarán al agua la clorofila y perderán color.
- Incorpora los guisantes, el calanacín y unas hojas de menta fresca (opcional) a un vaso de batir o procesador de alimentos. Tritura hasta formar un puré suave y homogéneo. Si el puré queda muy espeso, agrega un poco de agua reservada de la cocción hasta obtener la textura deseada.
- Deja templar antes de servir al bebé. Vierte, opcionalmente, un hilo de AOVE a la hora de servir.
Recuerda que los guisantes frescos son especialmente ricos en vitaminas y minerales; por lo que resultan especialmente indicados para bebés y niños en época de crecimiento.
Si los compras frescos y no vas a consumirlos de inmediato, congélalos y así conservarán sus nutrientes. Para ello, antes es preciso desgranar los y escáldalos 2 minutos en agua con sal. Si la idea es conservarlos dos o tres días puedes hacerlo en la nevera, sin desgranar, dentro de una bolsa o recipiente perforado.
Asimismo, puedes congelar este puré de guisantes en recipientes individuales durante un máximo de 3 meses. Guárdalo en el frigorífico si va a consumirse en los próximos 2-3 días.