El jengibre, también conocido como Zingiber officinale, es una raíz venerada en diversas culturas por sus innumerables beneficios para la salud. Esta especia tiene un sabor picante y ligeramente dulce que añade un toque especial a cualquier receta.
Pero más allá de su presencia en la gastronomía tradicional, el jengibre ha encontrado su lugar en el mundo de la mixología. Su perfil de sabor único ha cautivado a bartenders y entusiastas de los cócteles, y su capacidad para aportar una chispa de frescura y picante a las bebidas es verdaderamente excepcional.
Uno de los ejemplos más destacados de su uso es el Moscow Mule, un cóctel clásico que combina vodka, cerveza de jengibre y zumo de lima, ofreciendo un equilibrio sublime entre la dulzura, el picante y la acidez.
Además de su uso culinario, el jengibre posee propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antimicrobianas que contribuyen a mejorar la salud del sistema digestivo, aliviar náuseas y dolores musculares, y reforzar el sistema inmunológico.
Desde el punto de vista nutricional, el jengibre es rico en fibra dietética, vitamina B6, magnesio y manganeso. Sin olvidar que es bajo en calorías, por lo que es perfecto para incluirlo en una alimentación balanceada.
A continuación, te presentamos tres deliciosas recetas que te permitirán disfrutar de todo el potencial del jengibre.
Pollo al jengibre
El pollo al jengibre es una receta clásica que mezcla la suavidad del pollo con el toque picante y refrescante del jengibre.
Ingredientes:
- 500 gramos de pechuga de pollo
- 30 gramos de jengibre fresco
- 2 cucharadas (aprox. 30 ml) de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
- Corta el pollo en tiras delgadas y el jengibre en julianas finas.
- Calienta el aceite en una sartén y añade el pollo, salpimentándolo al gusto. Cocina hasta que esté dorado.
- Añade el jengibre y continúa cocinando durante 5 minutos más. Sirve caliente. Puedes acompañar con un poco de arroz basmati cocido y unas hierbas aromáticas picadas al gusto.
Té de jengibre y limón
La infusión de jengibre, como este té de jengibre y limón, es una bebida reconfortante con propiedades antioxidantes y digestivas.
Ingredientes:
- 20 gramos de jengibre fresco
- 1 litro de agua
- El jugo de 1 limón
Preparación:
- Pela y corta el jengibre en rodajas finas.
- Hierve el agua y añade el jengibre. Déjalo hervir durante unos 15 minutos a fuego lento.Galletas de jengibre
- Apaga el fuego, añade el jugo de limón y déjalo reposar 5 minutos. Cuela y sirve caliente.
Galletas de jengibre
Las galletas de jengibre son un postre delicioso y aromático, perfecto para compartir en familia. Si lo prefieres, puedes optar por esta deliciosa tarta de zanahoria y jengibre.
Ingredientes:
- 350 gramos de harina de trigo
- 100 gramos de azúcar moreno
- 200 gramos de mantequilla
- 1 huevo
- 10 gramos de jengibre en polvo
- 5 gramos de canela en polvo
Preparación:
- Mezcla la harina, el azúcar, el jengibre y la canela.
- Añade la mantequilla y el huevo. Amasa hasta obtener una masa uniforme.
- Forma las galletas con la forma que prefieras y colócalas en una bandeja de horno previamente engrasada. 4. Precalienta el horno a 180°C y hornea las galletas durante 15-20 minutos o hasta que estén doradas.
- Deja que las galletas se enfríen antes de servirlas.
Definitivamente, el jengibre es un ingrediente extraordinario por su sabor distintivo y sus múltiples beneficios para la salud. Ya sea en una receta principal, una bebida reconfortante o un dulce postre, se puede incorporar en una amplia variedad de recetas, ofreciéndote formas deliciosas y saludables para disfrutar de esta maravillosa especia.
¡Esperamos que estas tres recetas con jengibre te inspiren a explorar más las posibilidades de este poderoso ingrediente! Recuerda, la cocina es un espacio de creatividad y experimentación, por lo que te invitamos a probar estas recetas y a adaptarlas a tu gusto. ¡Buen provecho!