Seguimos nuestro tour de recetas de Italia para traeros un risotto de setas italiano que os quitará el sentido, ¡literalmente!
En cuanto a qué setas utilizar para que el risotto, puedes incorporar aquellas variedades que más te gusten, siendo importante (si no imprescindible) que sean frescas. Nosotros utilizaremos boletus y shitakes; si alguna de las variedades escogidas solo la encuentras deshidratadas, no te preocupes por utilizarlas, aunque si las obtienes frescas, mejor que mejor.
Para que os hagáis una idea, este risotto italiano se elabora con 150 gramos de shitake y 80 gramos de boletus en fresco, lo que equivale a 15 gramos y 8 gramos de setas deshidratadas (aproximadamente).
Ingredientes
- 150 gramos de -
- 80 gramos de -
- 1/4 de -
- 160 gramos de -
- 50 ml de -
- 1 litro de -
- 3 cucharadas de -
- 15 gramos de -
- 20 gramos de -
- Al gusto -
- Una pizca -
Pasos
- Pica la cebolla en juliana fina y luego trocea en pequeños pedazos. Pon a calentar a fuego lento en una sartén las 3 cucharadas de AOVE y cocina la cebolla a fuego lento hasta que se pochen.
- Trocea las setas shitake y agrégalas a las cebollas pochadas. Cocina las setas con la cebolla durante 7 minutos a fuego medio removiendo eventualmente. Cuando estén casi listas agrega una pizca de sal.
- Trocea los boletus, añádelos a la sartén y cocina un par de minutos más y pon el fuego al mínimo.
- En otra sartén a fuego medio y sin aceite añade el arroz para risotto, deberás remover a menudo hasta que el arroz se tizne blanco, no debe quedar dorado. Entonces añade el vino blanco y espera a que evapore.
- Pon el fuego de la sartén con las setas a la mitad y añade el arroz y un cucharón de caldo. Deberás añadir un nuevo cucharón de caldo cada vez que el arroz lo absorba.
- Tras unos 12-15 minutos el arroz rissoto debe estar tierno, asegurate de que quede un poco caldoso. Agrega entonces el queso parmesano y la mantequilla y remueve hasta que se integre por completo. Ya tienes listo tu rissoto de setas, deberás servir inmediatamente.
- Pica un poco de perejil fresco y agrégalo por encima de cada plato (no te excedas).