La salsa bechamel resulta perfecta para acompañar y aportar humedad a gran cantidad de elaboraciones BLW.
Esta tradicional salsa, no solo te servirá de base para elaborar multitud de recetas para bebés —como, por ejemplo, la de croquetas infantiles—, sino que, además, acompañará con nota sobresaliente todo tipo de platos de pasta y gratinados que ofrezcas a tu bebé.
¿A qué edad pueden probar los bebés la bechamel?
La bechamel es una salsa a base de leche, mantequilla y harina, aderezada con sal, nuez moscada y pimienta.
Teniendo en cuenta que los bebés menores de 12 meses no deben comer sal ni leche de vaca, y que la mantequilla se debe evitar hasta los 9 meses de edad, podríamos afirmar que es un alimento apto a medias. Sin embargo, podemos adaptar (más abajo te mostramos cómo) la receta para que sea 100% apta para bebés desde los 6 meses de edad.
Por supuesto, no se ofrecerá salsa bechamel comercial, cuyos ingredientes pueden resultar inapropiados para bebés y niños pequeños.
Cómo adaptar una bechamel para que sea apta para bebés
Para adaptar esta salsa bechamel para bebés haremos lo siguiente:
- Utilizar leche materna, de fórmula adaptada o de continuación. También se pueden emplear bebidas vegetales, a excepción de la de arroz por su elevado contenido en arsénico.
- Utilizar aceite de oliva en lugar de mantequilla.
- Suprimir el uso de sal.
Además, aunque no es estrictamente necesario, emplearemos harina de tipo integral. Esto hará que la receta conlleve un aporte nutricional más rico.
Recuerda que a partir de los 9 meses puedes emplear mantequilla (algunos pediatras dan el visto bueno a su uso incluso desde los 6-7 meses).
En cuanto a la leche y la sal, podrás usarlas a partir del año en sustitución a los ingredientes que os proponemos en esta receta.
Receta de salsa bechamel para bebés
La receta que os proponemos está adaptada de esta bechamel integral.
Ingredientes:
- 250 ml de leche materna, de continuación o de formula adaptada.
- 15 g de harina integral.
- 15 g de aceite de oliva suave.
- Una pizca de nuez moscada.
- Una pizca de pimienta recién molida (opcional)
Elaboración:
- Tamiza la harina integral y reserva, dejando aparte el germen y el salvado que quedó en el colador.
- Pon la leche a calentar hasta que hierva. Apaga y reserva.
- Coloca el aceite en una sartén a fuego medio y cuando esté caliente incorpora la harina tamizada. Remueve constantemente durante un minutillo; es importante que la harina se cocine sin llegar a quemarse.
- Vierte poco a poco la leche caliente al mismo tiempo que remueves con unas varillas o cuchara de madera. Remueve y sigue agregando leche hasta conseguir la textura deseada.
- Baja el fuego y deja cocinar de 8 a 10 minutos a fuego bajo, removiendo de vez en cuando. En este momento la salsa espesará aún más.
- Por último, salpimienta al gusto y condimenta con nuez moscada. Personalmente me gusta ser generosa añadiendo nuez moscada, pero te aconsejo que vayas añadiendo, probando y rectificando al gusto.
Esta bechamel para bebés se convertirá en la aliada perfecta de rellenos y pastas; también te abrirá un mundo de posibilidades a la hora de acompañar recetas BLW.
Ingredientes
- 250 ml de - Leche materna o adaptada
- 15 g de - Harina integral
- 15 g de - Aceite de oliva suave
- Una pizca - Nuez moscada
- Una pizca (opcional) - Pimienta recién molida
Pasos
- Tamiza la harina integral y reserva, dejando aparte el germen y el salvado que quedó en el colador.
- Pon la leche a calentar hasta que hierva. Apaga y reserva.
- Coloca el aceite en una sartén a fuego medio y cuando esté caliente incorpora la harina tamizada. Remueve constantemente durante un minutillo; es importante que la harina se cocine sin llegar a quemarse.
- Vierte poco a poco la leche caliente al mismo tiempo que remueves con unas varillas o cuchara de madera. Remueve y sigue agregando leche hasta conseguir la textura deseada.
- Baja el fuego y deja cocinar de 8 a 10 minutos a fuego bajo, removiendo de vez en cuando. En este momento la salsa espesará aún más.
- Por último, salpimienta al gusto y condimenta con nuez moscada. Personalmente me gusta ser generosa añadiendo nuez moscada, pero te aconsejo que vayas añadiendo, probando y rectificando al gusto.