Cuando hayas probado este mousse de chocolate blanco super esponjoso y cremoso, podrás comprobar que es una de las mejores recetas de mousse casero que puedes preparar.
El chocolate blanco proporciona a la mousse un suave sabor, pero con mucho carácter, dulzón y con una textura espectacular, y ya si lo combinas con unas virutas del chocolate que más te guste por encima, tendrás una receta 10 que triunfará haya donde la cocines.
Es de suma importancia que compres una tableta de chocolate blanco de repostería, ya que tiene más cantidad de cacao y menos de manteca de cacao que las convencionales, parece una tontería pero le dará mucho mejor sabor.
Si te gusta mucho el dulce, antes de servirlo a la mesa, puedes rociar la mousse de chocolate blanco con una cucharadita (o cucharada) de leche condensada.
Ingredientes
- 180 gr de -
- 150 ml -
- 4 -
Pasos
- Pon en un cazo al baño maría a derretir el chocolate blanco, preferiblemente chocolate blanco de repostería.
- Monta la nata con la batidora de varillas hasta que quede en su punto.
- Monta un merengue fuerte con las claras de huevo hasta que al girar el bol no se despegue.
- Integra la nata al merengue con movimientos envolventes, hazlo despacio ya que es muy importante que mantenga el aire.
- Haz lo mismo con el chocolate derretido añadiéndolo cucharada a cucharada muy lentamente.
- En unos vasos o copas agrega con mucho cuidado la mousse de chocolate blanco y tapa con papel transparente. Reserva en el frigorífico 2 horas.
- Cuando vayas a servir la mousse casera, puedes añadir unas virutas de chocolate o un poco de leche condensada.