La importancia de incluir recetas con vitamina C en la dieta infantil para el correcto crecimiento de los niños
De todas las vitaminas que nuestros pequeños deben consumir, la vitamina C es una de las más importantes, y que debe estar presente en su dieta absolutamente todos los días.
Esta vitamina es conocida como ácido ascórbico, y resulta imprescindible tanto para el desarrollo como para el crecimiento de los niños.
Además de los beneficios de la vitamina C en el crecimiento de los niños, debemos tener en cuenta que también aporta grandes ventajas como la recuperación de los tejidos tanto internos como externos, algo muy necesario para curar heridas que se puede hacer jugando, hasta las pequeñas roturas musculares que se producen por la actividad a lo largo del día.
Además, también ayuda a fortalecer los huesos y previene la aparición de enfermedades, entre las que destaca el resfriado.
Cinco ingredientes con alto contenido en vitamina C
Pasamos ahora a analizar las principales características de los cinco alimentos que os recomendamos que incluyáis en vuestras próximas recetas con vitamina C para niños, en los enlaces dentro de la descripción de cada ingrediente encontrarán algunas recomendaciones para hacer dichas recetas.
Papaya
La papaya es un alimento con grandes propiedades nutricionales, destacando su contenido en vitamina C.
Por ello, además de ayudar a reforzar su sistema inmunitario y ayudar a la recuperación de los tejidos, también va a ser beneficiosa a la hora de mejorar la calidad del sueño, fomentando un adecuado movimiento muscular, siendo también es un aporte positivo para estimular su memoria y a la vez mejorar su capacidad de aprendizaje.
Tomar zumo de papaya es una forma muy sencilla y deliciosa de tomar esta fruta para conseguir el aporte de vitamina C.
Brócoli
El brócoli es una de las mayores fuentes de vitamina C que podemos incorporar a la dieta de nuestros hijos.
Además, también tiene un alto contenido en vitamina A y vitamina B, sin olvidar el calcio, yodo, cobre, hierro, fósforo, potasio, manganeso y cinc.
Gracias a ello, disfrutaremos de una elevada protección frente a la anemia, además de que ayuda a depurar y limpiar el organismo.
Cierto es que el brócoli no es el alimento favorito de la mayoría de los niños, es por eso que ofrecérselo en forma de muffins de brócoli puede ser la solución perfecta.
Vean todas nuestras RECETAS con BRÓCOLI 🥦
Tomate
El tomate es otro de los ingredientes con vitamina C imprescindibles en las recetas con vitamina C para niños, ya que además de estar muy rico y tener una textura fantástica, también cuenta con propiedades muy beneficiosas para esta etapa de pleno desarrollo en la que se encuentran.
Ayuda a reducir los niveles de colesterol, además de que mejora el riego sanguíneo, lo cual se traduce en una reducción significativa de los riesgos de padecer en el futuro enfermedades cardiovasculares.
Es beneficioso para fortalecer el sistema inmunitario, protege la piel, mejora la cicatrización de las heridas y regula el sistema digestivo.
Ofrecérselo crudo siempre es la opción más nutritiva, pero está siempre no es la opción más viable cuando de niños se trata, por eso una passata de tomate, que es una salsa muy atractiva para el paladar infantil, es una muy buena elección para preparar unos macarrones con tomate saludables.
Naranja
La naranja es una de las frutas con vitamina C por excelencia, no sólo por su alto contenido en esta vitamina indispensable para los niños, sino por su peculiar sabor y sus magníficas propiedades nutricionales.
Es dulce y fácil de integrar en la dieta de nuestros pequeños, y cuenta con beneficios para su salud siendo un genial antioxidante, evita la absorción del colesterol malo, reduciendo el riesgo de padecer problemas de colesterol, es muy beneficioso para aumentar la absoción de hierro, por lo que va genial para prevenir o evitar la anemia en niños o aquellas que están relacionadas con el sistema cardiovascular.
Aunque un zumo de naranja es la forma perfecta de tomar vitamina C, encontramos también recetas muy ricas donde podemos agregar un pequeño aporte, como por ejemplo sirope de naranja o el bizcocho de naranja.
Coliflor
También es muy recomendable introducir la coliflor en su dieta, ya que contiene una gran cantidad de antioxidantes, un elevado contenido en fibra, carbohidratos de bajo índice el glucémico, sulforafanos y por supuesto, también vitamina C.
Sí a tu hijo no le gusta la coliflor puedes probar a ofrecerle unos muffins de coliflor y queso o un sencillo y delicioso pan de coliflor; o si no unos deliciosos nuggets de coliflor, nunca fallan.
De esta manera, el aporte de esta vitamina evita en gran medida la aparición de enfermedades y problemas de salud, principalmente los resfriados, mejorando la recuperación del organismo y fomentando un equilibrio muy saludable para nuestros hijos.