Sigue haciendo frío y, ahora más que nunca, se antojan platos calientes y recetas de cuchara; ¡esos guisos de la abuela que resucitan a cualquiera! Hoy te muestro 3 platos de cuchara que te servirán para elaborar tu menú semanal y despreocuparte de la comida por completo (abajo del todo encontrarás más recetas de guisos y potajes). Personalmente me gusta elaborar un buen guiso y congelarlo en varias partes; luego solo tengo que sacarlo la noche antes de comerlo y ¡listo!
Además de lo práctico que resulta hacer una buena olla de comida y congelarla para dos o tres días, las recetas de cuchareo son muy fáciles de hacer y muy pero que muy económicas, vamos, que todo son ventajas.
Fabada asturiana

Comienzo este recopilatorio con una de las recetas de cuchara más populares en toda España: la fabada asturiana. En Andalucía, y más concretamente en Sevilla, existe un plato caliente de lo más parecido a las fabes de Asturias. El guiso o potaje de chícharos lleva embutidos, panceta y alubias; pero, a diferencia de la fabada tradicional, se elabora también con verduras como la patata, la zanahoria, el pimiento, el tomate, la cebolla y el ajo. Sea como sea, este plato le quita el frío a cualquiera, ¿no crees?
Ingredientes:
- 500 g de fabes (ideal si son fabes de la Granja)
- 250 g de panceta curada
- 2 chorizos asturianos
- 2 morcillas asturianas
- 200 g de hueso de jamón
- Sal (al gusto)
- 3 Hebras de azafrán
- Agua
Elaboración:
- Deja las fabes remojando en agua fría durante toda una noche. Asimismo, pero en agua templada, deja en remojo la panceta y el hueso de jamón.
- Vierte en una olla las fabes junto al agua de remojo hasta cubrirlas un par de dedos por encima. Si fuese necesario, añade más agua. Remueve y pon a calentar.
- Una vez hierva, introduce la panceta y el hueso de jamón escurridos junto a los chorizos y las morcillas pinchadas. Coloca los chorizos y las morcillas en la parte superior para controlar que no se rompan durante la cocción.
- Espuma el guiso y cocina durante 30 minutos a fuego alto.
- Incorpora entonces el azafrán diluido en un poco de caldo del mismo guiso. Prueba el caldo, y corrige de sal si fuese necesario; ¡ojo que el hueso de jamón aporta mucho sabor salado!
- Baja el fuego y cocina durante 2 horas más, removiendo de vez en cuando y añadiendo un vaso de agua fría un par de veces durante la cocción.
- Una vez las fabes estén tiernas, rectifica de nuevo la sal y aparta del fuego. Deja reposar aproximadamente una hora.
- Retira los embutidos, la panceta y el hueso. Sirve las fabes y el caldo con el resto de ingredientes al gusto, troceados por encima.
Cocido de garbanzos y acelgas

Este cocido de garbanzos es amado por todos en casa. Su sabor es impresionante y, si eres amante del cuchareo, estoy convencida de que a ti también te encantará. El garbanzo aporta mucha fibra y su ingesta regular produce numerosos beneficios en la salud; es una legumbre rica en proteínas y en ácidos grasos como el ácido oleico y el linoleico. Un excelente acompañante para tus guisos y recetas de cuchara, al igual que las acelgas.
Ingredientes:
- 350 g de garbanzos
- 1 Kg de acelgas
- 6 dientes de ajo
- 5 cucharadas de tomate triturado
- 4 rebanadas de pan de unos 10 g cada una
- 1 cucharada de vinagre de vino blanco
- 1 cucharadita de comino en grano
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 2 litros de caldo de verduras (puedes sustituir por agua)
- 8 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de sal (mejor si es sal marina)
Elaboración:
- Deja los garbanzos en remojo durante toda una noche.
- Coloca los 2 litros de caldo en una olla grande y, una vez caliente, incorpora los garbanzos escurridos y las acelgas limpias y troceadas (hojas y pencas).
- Deja cocinar a fuego medio durante una hora y media en olla normal o 30 minutos en olla rápida. Reserva el caldo sobrante para más adelante.
- Echar el aceite en una sartén y fríe los ajos cortados en rodajas hasta que se doren ligeramente. Resérvalos.
- En la misma sartén fríe ahora las rebanadas de pan. Primero por un lado y luego por el otro hasta que el pan se dore por completo y quede crujiente. Reserva.
- Añade a la misma sartén el pimentón y remueve rápidamente para que no se queme. Vierte de inmediato las 5 cucharadas de tomate triturado. Remueve y deja reducir un par de minutos a fuego medio hasta que el tomate espese, vigilando que no se queme.
- Una vez listo, vierte en un vaso de batir el tomate triturado, los ajos, el pan frito, el comino, el vinagre y la sal, junto con medio vaso del caldo donde cociste los garbanzos y las acelgas.
- Tritura hasta formar una pasta homogénea.
- Coloca los garbanzos y las acelgas en una sartén grande o wok junto con la mezcla anterior y un vaso del caldo de los garbanzos. Si quieres un plato más caldoso, añade más caldo en este paso. Remueve y deja cocinar a fuego medio durante unos 10 minutos, el tiempo suficiente para que se entremezclen bien los sabores.
Papas con choco

Y para terminar, quiero hacer honor a Huelva con una receta de cuchara típica de las abuelas andaluzas: las papas’ (que no patatas) con choco. Este es un guiso delicioso con un sabor a mar exquisito; si nunca lo has probado ahora es el momento. Te explico en el paso a paso cómo puedes congelarlo para adelantar tiempo durante la semana.
Ingredientes:
- 1 choco mediano de aproximadamente 900 g (limpio y troceado)
- 5 patatas medianas
- 1 cebolla
- 1 pimiento verde
- 3 dientes de ajos
- 1 tomate mediano rallado
- 125 ml de manzanilla (puedes sustituir por vino blanco, aunque la manzanilla le da a este guiso un sabor más espectacular).
- ½ cucharadita de pimentón dulce
- 1 hoja de laurel
- 100 g de guisantes congelados (opcional)
- 500-600 ml de agua
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
Elaboración:
- Pon un chorrito de aceite en una sartén a fuego medio-alto con la cebolla y el pimiento cortados finamente, y la hoja de laurel. Una vez la cebolla comience a transparentar, añade los ajos troceados. Remueve un minuto y añade el tomate rallado. Deja al fuego durante un par de minutos más.
- Incorpora el choco troceado, rehoga con sal y remueve. Cocina unos 5 minutos.
- Agrega el pimentón, remueve rápidamente para que no se queme y añade la manzanilla.
- Deja que el alcohol reduzca e incorpora el agua. Cocina durante 10-15 minutos a fuego medio. Si quieres congelar este guiso para ahorrarte tiempo otro día, después de este paso es cuando debes hacerlo. Cuando lo vayas a descongelar podrás retomar esta receta en el siguiente paso.
- Incorpora las patatas limpias y chascadas (al chascar las patatas, estas sueltan más almidón y se espesa de forma natural el caldo del guiso). Si quieres agregar los guisantes, ahora es el momento.
- Deja cocer unos 20-30 minutos hasta que la patata esté tierna. Rectifica la sal y, ¡a disfrutar!
¿Buscas más platos de cuchara? Echa un vistazo a las siguientes recetas:
- Potaje de vigilia (guiso de garbanzos con bacalao)
- Puchero
- Lentejas veganas
- Estofado de pollo
- Potajes en olla express
- Potajes de semana santa
- Patatas viudas
- Porrusalda
