Guau, suena bien ¿eh?. Con estas calores se agradece enormemente un gazpacho bien fresquito como el que hoy os traemos.
El pepino es un ingrediente suave, muy parecido al melón, que introducido en forma de sopa fría puede ser una excelente forma de que nuestros niños lo consuman.
Quizá en ensaladas no sea el alimento preferido por nuestros hijos, pero esta deliciosa sopa fría de pepino con albahaca encantará a toda la familia.
Lo mejor de las sopas y cremas frías es que los alimentos se toman crudos, beneficiándonos de todos y cada uno de sus nutrientes. Por otro lado, son muy rápidas y fáciles de hacer.
SOPA DE GAZPACHO Y ALBAHACA
Esta receta podéis adaptarla perfectamente a vuestros gustos personales. Las sopas frías admiten generalmente muy bien todo tipo de quesos, y en cuanto a la guarnición, las frutas y el jamón le van de maravilla.
Es ideal como cena en noches calurosas, o como primer plato en un almuerzo de verano.
Si queréis jugar con la textura de la sopa, os aconsejamos echar poca agua e ir añadiendo más hasta conseguir el espesor que os guste.
No nos enrollamos más y ¡vamos con esta maravilla Cocinillas!
Ingredientes
- 2 -
- 1 -
- 1 -
- 125 g de -
- 16 g de -
- 1 vaso de -
- Un chorrito de -
- -
Pasos
- Lo primero que haremos será lavar los ingredientes necesarios. Introducimos el pepino, la manzana sin piel, el yogur, el ajo, la albahaca, un chorrito de aceite de oliva virgen (como dos cucharadas), el agua, un chorrito de zumo de limón, una pizca de sal y otra de pimienta en un recipente apto para batir.
- Trituramos todo con la ayuda de la batidora hasta que quede una sopa homogénea y sin grumos.
- Probamos y corregimos con más zumo de limón, sal o pimienta si es necesario y volvemos a batir hasta que quede a nuestro gusto.
- Dejamos enfriar y servimos muy fría con unos trocitos de fruta y jamón por encima (opcional).